1. Mesa de trabajo
Debes tener una mesa adecuada para trabajar, cúbrela con un plástico que puedas limpiar fácilmente o desechar después del uso, esto con el fin de prevenir que las gotas que puedan caer de resina no se peguen a tu mesa.
La superficie de tu mesa debe estar completamente nivelada para asegurar una distribución uniforme de la resina en los moldes.
2. Espacio:
Asegúrate que el espacio donde trabajes esté muy bien ventilado naturalmente, que la corriente de aire entre y salga; ayudando a disipar los vapores que provienen de la resina epóxica, si trabajas en un lugar cerrado debes usar ventiladores.
3. Temperatura:
La resina epóxica se seca en temperatura natural, si la temperatura ambiente es cálida la resina secará más rápidamente.
En climas fríos el tiempo de secado se demora un poco más, sin embargo no es aconsejable forzarlo para acelerar el secado con electrodomésticos de calor.
En caso de que hayan mosquitos o polvo se deben tapar las piezas dispuestas para secado con toldillo o un colador en caso de ser una sola pieza.
Si cae un animalito en la pieza aún estando húmeda puedes sacarla y moldear con cuidado la parte estropeada, si de lo contrario ya se secó la pieza debes pulirla hasta sacar objeto extraño y agregar una pequeña parte de resina para curar lo estropeado.
4. Cuidado personal:
Aunque su reacción química no es altamente tóxica se considera que su exposición prolongada podría repercutir negativamente en tu salud; para tu cuidado personal al trabajar con resina epóxica debes ponerte máscara antigases, guantes de vinilo, gafas de protección y usar ropa de trabajo o un delantal.
Si cae resina epóxica sobre tu piel lava inmediatamente con agua y jabón.
5. Utensilios:
Todas las piezas que se usen para mezclar la resina epóxica deben ser de silicona idealmente, pero si manejas utensilios de pasta u otros materiales debes lavarlos muy bien con alcohol para evitar pegues. Nunca guardes los utensilios sin antes limpiarlos.
6. Cuidado de los moldes de silicona:
Se recomienda usar antidesmoldante aunque muchos resinadores deciden no usarlo por la poca utilidad que le encuentran, sin embargo el valor real del desmoldante se encuentra en el alargue de vida útil que le dará al molde.
Debido al continuo uso el molde tiende a porosearse por diferentes razones, entre ellas que la pieza en resina se va llevando pequeñas partículas imperceptibles de silicona cuando se desmolda, y si te equivocas en algún punto de la mezcla la resina epóxica puede quedarse totalmente pegada al molde hasta tener que rasgarlo.
Debido a la electrostática que los moldes poseen ellos tienden a recoger polvo y partículas del ambiente casi imperceptibles pero que pueden opacar tu pieza final, por ello siempre debes almacenarlos en bolsas plásticas individuales separados uno del otro.
Para su limpieza se recomienda usar una mezcla de agua/alcohol y frotar con los dedos hasta retirar todos los residuos, no limpies con lana ni esponjas abrasivas, no los guardardes sin haberlos limpiado y secado a profundidad.
No debes usar herramientas cortopunzantes para su manipulación, debes evitar mantenerlos expuestos al sol y/o sitios húmedos.
Al usar la pistola de calor evita acercarla demasiado y prolongadamente al molde de silicona.
Se estima que la vida útil de un molde de silicona sometido a trabajo diario puede llegar a durar entre 6 a 8 meses, si quieres alargar su vida útil sigue todas nuestras recomendaciones.
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